Ajuste del diámetro del haz de luz: el ajuste del diámetro del haz de luz de la mayor parte de lámparas convencionales de quirófano se realiza por medio de estructuras mecánicas que regulan y reflejan las fuentes de luz. La iluminancia de la zona quirúrgica también se ajusta mediante estructuras mecánicas. Por ejemplo, la iluminancia de la zona quirúrgica se verá reducida si se aumenta el diámetro del haz de luz. Éste es el motivo por el que los cirujanos utilizan 3 cabezales de iluminación durante una intervención cardíaca, para contrarrestar la caída de la iluminancia en la zona quirúrgica causada por la difusión del haz. Otro ejemplo es la incorporación de estructuras mecánicas convencionales para enfocar y obtener haces más concentrados con un diámetro más pequeño. Sin embargo, la iluminancia intensa en la zona quirúrgica es altamente perjudicial para los ojos de los cirujanos. Por consiguiente, la iluminancia de la lámpara de quirófano debe reajustarse para no molestar a los cirujanos.
La serie de lámparas quirúrgicas HyLED 760/730 ha heredado las exclusivas ventajas de la serie HyLED 9. Al adoptar un ajuste del diámetro del haz completamente electrónico (no mecánico), se garantiza que la visión de los cirujanos no reaccionará significativamente a la iluminancia del campo quirúrgico. Esta tecnología mejora sobremanera la protección de la vista de los cirujanos. Por este motivo, y a juicio de Mindray, una buena lámpara de quirófano debe, en primer lugar y por encima de todo, reducir el daño que los rayos provocan en la vista de los cirujanos.
Eliminación de sombras: la iluminancia residual durante la intervención depende en gran medida de la iluminancia inicial de la lámpara de quirófano. No obstante, ésta no es una relación lineal. Una zona quirúrgica típica da cabida a 3 o 4 cirujanos; es decir, en el caso de una lámpara con dos cabezales en la que las cabezas y los hombros de 2 cirujanos obstruyen la fuente de luz, la luz realmente efectiva de la zona quirúrgica sólo incluye los rayos que no quedan obstruidos.
Temperatura de color: podemos conocer y percibir el mundo gracias a que vivimos dentro del intervalo de temperatura de color de la luz solar (4.300-4.350 K). Los cirujanos pueden identificar correctamente los tejidos orgánicos únicamente dentro del mismo intervalo de temperatura de color (4.300-4.350 K). Ésta es la razón por la que Mindray ha fijado la temperatura de color de la serie de lámparas HyLED760/730 a 4.350 K. Se comparan tres tipos de gráficas de temperatura de color de una lámpara de señales: rojo (3.500 K), amarillo (4.350 K) y verde (5.000 K).